Resulta muy obvia la importancia que tiene conocer bien y analizar la forma en que el caballo se apoya y se propulsa sobre el suelo que pisa: Usamos al caballo para que nos transporte sobre el suelo.
En el caso de un automóvil, los
neumáticos y sus características (la presión de inflado, el dibujo, el
equilibrado, la anchura, etc.) determinan en gran medida de qué forma la
energía producida por el motor se transforma en movimiento hacia adelante. En
las competiciones automovilísticas se precisa qué modelo de neumático da más
agarre al suelo, qué otro permite más estabilidad en las curvas, y cuál debe
ser el ideal en caso de lluvia. Y a nuestro nivel de conductor cotidiano nos
preocupa que nos puedan multar por tener excesivo desgaste en las ruedas de
nuestro coche.
Trasladando esto a nuestro mundo,
quiero centrarme en qué ocurre cuando el casco del caballo toca el suelo, más
allá de consideraciones sobre la conformación y la anatomía del casco y de las patas del caballo. Es decir
¿cómo funciona el casco?. ¿Qué propiedades han conferido al casco los 65
millones de años de evolución del caballo?.
Por supuesto, no quiero pasar por alto la importancia del
resto de estructuras superiores que determinan e influyen en cómo se mueve un
caballo en particular. Pero es el contacto con el suelo y los mecanismos de
propulsión y amortiguación lo que pretendo estudiar. Y el casco que es el
elemento anatómico primero que se encarga de transmitir la fuerza y energía desarrollada
por las patas -y por todo el cuerpo del caballo- para generar movimiento y
propulsión. Es el elemento que determina el agarre al suelo, el que primero que
amortigua (por ejemplo al recibirse de un salto), con el que se frena. Y sobre
todo con el que el caballo toca, siente y palpa el suelo sobre el que está
(¿realmente hay sensibilidad en el casco?. ¿En qué parte de él?).
Muy sabiamente dicen los
ingleses: “No hoof, no horse” (Sin casco, no hay caballo), porque
dolencias, defectos y enfermedades del casco pueden llegar a hacer inservible a
un animal.
El caballo es un ungulado (anda
sobre sus dedos que acaban en pezuñas córneas) perisodáctilo (el número de
dedos sobre el que se apoya es impar.). Dentro de este orden sólo están la
familia de los rinocerontes y de los tapires -que se apoyan en tres dedos,
(suborden ceratomorpha); y los équidos -que usan sólo uno (suborden
Hippomorpha). Es decir, estamos ante otra singularidad del caballo.
Pezuñas de un dromedario Estructura del casco
¿Pisan los caballos primero con
los talones? ¿O pisan antes con la punta?. Sobre esto he visto -incluso
participado- en controversias entre gente muy entendida en caballos que usaban
argumentos curiosos. Para no aburrir al lector con éstas, diré que el casco
está diseñado básicamente para pisar primero con los talones y, tras el apoyo,
despegar del suelo con las lumbres o punta del casco. (Véanse estos enlaces: https://www.youtube.com/watch?v=-_nXE5BIjjE;
Hay varios aspectos muy
intuitivos que apoyan esto que parece una gran obviedad:
1.
La forma óptima de desplazamiento con un menor
gasto de energía es la rotación: Pocos inventos tan efectivos como la rueda. En
un plano horizontal, cualquier cuerpo apoyado en ruedas mantiene la altura de
su centro de gravedad constante. Por tanto la única energía que se consumiría
es la necesaria para vencer la fricción con el plano. El caminar de los
animales - incluso el nuestro- imita este ideal físico tan básico. En las
carreras el galope de los caballos imita el funcionamiento de una rueda en la
que los radios son las cuatro patas. Por eso en galope tendido los caballos
disocian la diagonal. (Véase este link https://www.youtube.com/watch?v=y04Bj4g7x6Q
por la disociación de la diagonal. O este otro un poco más largo: https://www.youtube.com/watch?v=zQDAUv6d_KY
).
2.
El movimiento del caballo es primordialmente
ganando terreno siempre. Por tanto las patas se mueven como los radios de una
bicicleta basculando de delante hacia atrás haciendo avanzar el cuerpo del
caballo al pasar por encima del punto de apoyo del casco -que es el centro
instantáneo de rotación.
3.
La ranilla y la almohadilla plantar -encargadas
de la amortiguación- están en la cara posterior del casco. Si el primer
contacto con el suelo se realizara en la parte delantera o por igual en todo el
casco, estas estructuras se ubicarían en esos sitios. El hecho de que estén
detrás demuestra que el casco está pensado para tocar el suelo primero con los
talones.
4.
Por contra la muralla del casco que está
diseñada para soportar el desgaste y la erosión del empuje está en la parte
anterior. Por tanto el despegue del suelo es con las lumbres.
Como ilustración de los puntos anteriores recomiendo echar
un vistazo a este divertido video de rodeos -con varios caballos cerreros- : https://www.youtube.com/watch?v=TRgXlkORqBw . (Incluso los toros y becerros
que se pueden ver también pisan primero con el talón y luego despegan con la
parte anterior de las pezuñas).
Esto que parece tan obvio,
concita desacuerdo. Y es lógica y natural la polémica que puede ilustrarse muy
bien con este otro video que compara cómo pisa un casco herrado y otro
descalzo:
Entonces, ¿cambia la manera de pisar cuando un caballo se
somete a herraje, a la doma o simplemente al peso del jinete?.
Antes de responder miremos qué ocurre en el interior del
casco cuando el caballo pisa primero con el talón, o primero con las lumbres.
Veamos cómo se comportan huesos, articulaciones y tendones representados
esquemáticamente en la siguiente figura:
Figura 1: Estructuras internas del casco[1]
Si el caballo pisa primero con
los talones, la articulación del menudillo, al descender y comprimir la
cuartilla y el casco, rápidamente tensa el tendón flexor digital profundo (DDFT
en la figura de más arriba). Así, este tendón
recibe gran parte de la energía producida en el impacto del casco sobre el
suelo, y la almacena estirándose como un resorte mientras la palma del casco y
los talones están apoyándose en el suelo. Justo después ocurren dos cosas
(casi) a la vez:
Figura 2: Pisando primero con los talones[2]
1.
Primero, la articulación del tejuelo (pedal
bone-coffin joint) rota hacia adelante hacia el punto de despegue (que son las
lumbres del casco);
2.
y segundo, al despegarse el casco del suelo, la
energía que almacenaba el tendón flexor digital profundo se recupera cuando
éste pasa de estirado y tensado a relajado de nuevo.
Los indios de Norteamérica (y
en muchas otras partes y épocas del mundo) usaban para disparar sus flechas
arcos hechos con los tendones de las patas de los bisontes que cazaban. Esto da
una idea de la gran capacidad que tiene el material de los tendones, para
almacenar energía, deformándose; y luego liberarla y transmitirla. El
funcionamiento del tendón flexor digital profundo sigue el mismo principio.
Figura 3: Pisando con las lumbres primero[3]
Pero si el casco pisa primero
con las lumbres, la articulación del menudillo al descender sobreestira el tendón justo después del
impacto; e inmediatamente después, cuando el talón bascula hacia atrás para
apoyarse (haciendo rotar hacia atrás la segunda falange -coffin bone en la
figura-), el tendón es de nuevo sobreestirado desde el otro extremo. Estos dos
procesos de estiramiento se siguen el uno del otro, resultando en una tensión
superior a la normal antes de liberar la energía en la relajación. Todo hace
pensar que en este caso el funcionamiento es impropio a cómo está diseñada la
articulación para trabajar en condiciones óptimas.
Esta sobretensión se transmite
a los huesos a los está unido el tendón flexor digital profundo, produciendo
fricción, que eventualmente puede ser patogénica y provocar dolor e
inflamaciones. Todo esto está ya
publicado en EEUU. desde 1974 por autores como Robert Bowker (DVM PhD); o James
Rooney (DVM PhD) (Véase: http://www.horseshoes.com/farrierssites/sites/rooney/navicular/navicular.htm)
Entonces,
si la mejor y más natural forma de pisar es primero con los talones, ¿porqué
vemos que los caballos pisan muchas veces primero con las lumbres?. Ruego al
lector que vea este vídeo de Centaur Biomechanics de saltos en las Olimpiadas de Londres
2012: https://www.youtube.com/watch?v=FzuZxnFLuQI
En el siguiente artículo intentaré acercarme a una
respuesta satisfactoria.
Fernando Morote Ibarrola
Ocurrencias Hípicas