BLANCA
De momento, dejarte claro que la edad en el caballo limita bien poco: todas las edades son buenas para mejorarlos y si con ello acabamos haciéndoles felices, mejor que mejor. Y la mayor felicidad para un caballo es hacer que nos lleve bien y que le demos órdenes razonables. Nunca es tarde si la dicha le llega al caballo (Vid. “El Principito” de A. de Saint Exupéry, cap. X). Espero vernos en breve.
EDUARDO
Ya sé quien va a ser mi continuador. Pero espabila para montar pronto como yo. “A Dios rogando y con el mazo dando” u “obras son amores”.
Soluciones imaginativas: ¿te acuerdas cuando te hacía saltar con el sobrante de las riendas por debajo del cuello? Otra: casi todos los días monto con las riendas de la Hermana Teresa de última generación. Son de cordón (made in “Don Cordón” de mi más que amigo Paquito Carretero). No se rompen ¡faltaría más!, pero si tiras de la boca del caballo, te haces más daño que él. Conclusión, como no quiero hacerme daño, no tiro de la boca del caballo. Se aproxima a tu filosofía ¿no?
JULIO
Si mal no recuerdo, yo di tres pistas y tú me devuelves una sólo. Pero estamos de acuerdo en que eres tú. Si mi responsabilidad es ser serio, la tuya, la de Eduardo, Marcosss, Matías, Javis (también más de uno) y un buen puñado de alumnos más, es la de estar al quite para aclarar lo que quede confuso o lo que necesite mayor aclaración. Como veis, necesito vuestra ayuda. Hay otros Julios que debieran dar la cara o el callo. Y Fernandos, y Luises, y Gonzalos, (¿te acuerdas, Gonzalo?) y Rafas, y Borjas, y Juanes, y Manolos yyyyy casi todo el santoral. De las mujeres hablaremos el próximo día
PACO BENITEZ
Mi amigo Paquito es tan humilde, que hasta hace poco no me enteré de su “La Farola de Málaga”. Muy entretenida. Como para apoyarse en ella y con unas cañas para refrescar, arreglar el mundo.
GABRIEL GAMIZ
Confirma que mi “Paz y espero que os sirva a alguien”, efectivamente, sirve para algunos. En su blog sobre el Raid (http://ggjineteraid.blogspot.com), he encontrado cosas que sirven para el CABALLO. Mucho servir. Interesante.
EUGENIA (saltoshipicos.wordpress.com)
Sobre actualidad ¿madrileña? Con informaciones interesantes. Como igual meto la pata, mejor que la veais con vuestros propios ojos
Paz para todos
Gracias Jose estoy muy orgulloso de ser amigo del "Cura", un fuerte abrazo
ResponderEliminaramen
ResponderEliminarGracias Jose Manuel, en conparacion con tus articulos, los mios son mera información de un jinete mayor, con muchos años de caballos y de kilometros.
ResponderEliminarSaludos de Gabriel.
GRACIAS JOSE MANUEL:
ResponderEliminarMe tengo que acordar de:
1.-Abductores Abductores!!!!
2.-No colgarme de la boca!!!
Hola Jose,
ResponderEliminarcada vez está más animado e interesante el blog, de lo que me alegro muchísimo.
Me gustaría comentarte a raíz de éstos últimos artículos algo que ya hemos hablado y practicado cuando hemos coincidido, pero que no acabo de conseguir y es algo tan "sencillo" como alcanzar una equitación seria y definida que me permita afrontar los saltos de una manera tranquila y agradable.
pienso que los conceptos básicos los conozco y aplico en la monta en liso, pero los problemas surgen al afrontar un recorrido.
Creo, y corrígeme si me equivoco, que lo fundamental, sobre todos en los trancos finales hasta un obstáculo, es sentir al 100% al caballo, tenerlo en la mano, hacerse uno con él y, copiándote un ejemplo que me pusiste una vez, debemos llegar a conseguir en esos trancos una conexión máxima entre lo que enviamos por la pierna y lo que recibimos de su boca/nuestra mano, como si fuera la caja de cambios de un coche, en el que para correr no aceleramos, sino que reducimos a una marcha más corta. Es decir, debemos activar al caballo lo justo como para que tire de nosotros sin que corra y se nos abra ó que se nos quede detrás de la mano, sintiendo esa conexión pierna mano, con la simple ayuda de los dedos. Parece sencillo y, gracias a Dios, hay momentos aislados, muy aislados, en que se consigue, pero las más de las veces no llega, por lo que, a lo peor, intervienen factores mentales ajenos a nuestra voluntad (muy ajenos en mi caso) que nos bloquean. No lo sé, pero me gustaría oir (leer) tus comentarios y saber si es misión imposible o puede conseguirse.
Un abrazo.
Jacky.